Norma Legal Oficial del día 25 de octubre del año 2017 (25/10/2017)


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NORMAS LEGALES

Miércoles 25 de octubre de 2017 /

El Peruano

Chicho y Margarita Padilla en 1940, y el vals Ventanita por el Dueto García Flores en el año 1941, con el acompañamiento de la Orquesta de Salón de Columbia. Asimismo, en el año 1942, el intérprete puertorriqueño Fausto Delgado grabó el vals Mi Primera Elegía, con letra de Esmeralda Gonzales Castro, conocida como Serafina Quinteras, y música de Eduardo Márquez Talledo; Que, el giro entre la década de los años 1930 y 1940 constituyó un punto de quiebre importante para el posicionamiento de la música criolla como forma de música nacional. Para Fred Rohner, investigador de la cultura musical criolla, Eduardo Márquez Talledo se ubica entre la generación de la Guardia Vieja y la subsiguiente. Esta información es complementada por los investigadores Rodrigo Chocano y José Antonio Llorens, quienes en la publicación Celajes, florestas y secretos destacan que Eduardo Márquez Talledo pertenece a una segunda generación de compositores que se posiciona entre las décadas de los años 1940 y 1950, y que expanden el repertorio criollo hacia audiencias con gustos más cosmopolitas; Que, para el reconocido compositor Manuel Acosta Ojeda, tanto Felipe Pinglo como Eduardo Márquez Talledo representaron momentos de reacción, por parte de la canción costeña, ante los nuevos medios masivos de consumo y reproducción musical que ingresaron durante la primera mitad del siglo XX. Mientras que el primero surgió desde Barrios Altos, el segundo lo haría desde el Callao en los años 30; Que, el alcance internacional ganado por la obra de Eduardo Márquez Talledo en la década del año 1940 se consolidó con la publicación de su tema más emblemático, Nube Gris, publicado por la Editorial Lagos de Buenos Aires, Argentina, en el año 1949, Se advierte de igual manera también, que figuró como socio de SADAIC ­ Sociedad Argentina de Autores y Compositores de Música desde enero de 1950. A partir de la misma fuente es posible saber que entre los años 1949 y 1950 la Editorial Lagos jugó un papel clave en la difusión de Nube Gris y otros temas de Eduardo Márquez Talledo; Que, hacia fines del año 1949, Nube Gris fue cedido en contrato a Editorial Ritmo y Melodía de España y a Editorial Universelles de Francia. En el transcurso del año 1950, obtuvo éxito en Brasil a través de un contrato de sub-edición con la Editora Tupy, y fue incluido en la banda sonora de la película Mary tuvo la culpa, del director argentino Carlos Torres Ríos. Cartas cursadas en el año 1951 con los representantes de Editorial Lagos muestran que ese año se grabó un arreglo de Nube Gris en ritmo de mambo; Que, la necesidad de contar con una entidad a nivel local para el manejo de derechos de autor lo estimularía a formar en el año 1952, la APDAYC ­ Asociación Peruana de Autores y Compositores. Así, la trayectoria de Eduardo Márquez Talledo también tuvo un impacto a nivel de estructuras de gestión y formalización del sector musical en el Perú; Que, un segundo momento de importancia en la trayectoria de Eduardo Márquez Talledo se da entre los años 1960 y 1961. Este periodo coincide con la emisión del programa televisivo Festival Cristal de la Canción Criolla en el año 1960 a través en canal 13 y que, de acuerdo a una nota de Manuel Acosta Ojeda, consistió en la dramatización de una serie de temas clásicos del cancionero criollo a cargo de actores reconocidos de la época. Entre los valses que fueron seleccionados para una primera temporada de este programa estuvo su tema Ventanita, junto con composiciones de Felipe Pinglo, Pablo Casas y Lorenzo Humberto Sotomayor. Al año siguiente se organizaría el Primer Festival Cristal de la Canción Criolla, en el cual Márquez Talledo obtiene el segundo premio con su vals Yo no niego, el mismo que es grabado en un LP conmemorativo; Que, el tercer momento de importancia dentro de la trayectoria de Eduardo Márquez Talledo es el período entre los años 1969 y 1971, el cual coincide con el Gobierno Revolucionario de las Fuerzas Armadas. Asimismo, varias de las composiciones de este período revelan la admiración del compositor por el general Juan Velasco Alvarado, expresada a través de valses como Ahora sí que va de veras, Hasta nunca J.P.C., Nueva vida

en mi Perú o Pueblo peruano. Sin embargo, el sentido de reivindicación del pueblo peruano en la obra de Márquez Talledo no estaría limitado a esta etapa específica de la historia política del país. Así lo demuestran temas como Sábado, día del pueblo y Pobre obrero, compuestos en los años 1929 y 1930, inspirados en la represión a los movimientos obreros de finales de la década del año 1920, y que muestran solidaridad para con sus protagonistas; Que, otro aporte de Eduardo Márquez Talledo al cancionero nacional está en sus festejos. Temas como Pancha Remolino, Perú Son y Congorito son hoy emblemáticos. El primero de estos fue interpretado por Vicente Vásquez, y por el dúo formado por Arturo "Zambo" Cavero y Óscar Avilés. Sobre Congorito, si bien comparten la frase "Congorito digo yo, Congorito", no se trata de la misma versión que fuera recopilada por Rosa Mercedes Ayarza en el año 1938. Es muy probable que Eduardo Márquez Talledo haya tomado como referencia la recopilación de Mercedes Ayarza, incorporando sus propios aportes; Que, sobre el tema Perú Son, de acuerdo al material de archivo obtenido, este habría sido compuesto en el año 1955, siendo catalogado por el compositor como motivo negroide. Como se destaca en una nota publicada en el año 1986 por el diario El Comercio, entre otros festejos conocidos del compositor estarían Va a llover y Del Chirimoyo a Malambo. La letra de este último tema sería de Catalina Recavarren, mientras que la música correspondería a Márquez Talledo. Si bien ha sido datado por el propio compositor entre los años 1939 o 1942, sería una grabación realizada en el año 1975, por el conjunto Los Frejoles Negros, la que lo volvería popular. Cabe destacar que esta no fue la primera grabación del tema, ya que en el año 1944 fue interpretado por Delia Vallejos acompañada por Jorge Huirse en el piano; Que, un aspecto que destaca en la obra de Eduardo Márquez Talledo es su colaboración con Esmeralda Gonzales Castro, mejor conocida como Serafina Quinteras, con quien crea más de 10 temas musicalizando sus letras. Resulta de particular importancia Mi Primera Elegía, pues este habría sido premiado por el Consejo Provincial de Lima y el Centro Musical Felipe Pinglo. Otros temas resultantes de la colaboración de ambos son los valses Te vi una vez, Caramelo, Adiós al ruedo, Lira Limeña, El estibador y El pescador; Que, por otro lado, Eduardo Márquez Talledo dedicó muchos de sus temas a importantes figuras del ámbito artístico, cultural, deportivo y político de su contexto. Así, destacan temas como A Manuel Raygada y A la memoria de Manuel "Chato" Raygada, dedicados a este compositor también del Callao; el vals Presente mi Coronel, dedicado al Coronel Néstor Gambetta; el tema Primavera, dedicado a la poetisa Blanca Varela; el vals Arriba Atlético Chalaco o León Porteño, dedicado al club deportivo Atlético Chalaco; los temas Rosa Mercedes y Eloísa Angulo, dedicados a las figuras de la recopiladora Rosa Mercedes Ayarza y de la intérprete Eloísa Angulo; el tema A Carlos Carillo Smith, destacado abogado del Callao que fue senador por dicha jurisdicción entre los años 1963 y 1968. Del mismo modo, dedicó valses a periodistas del Callao como Manuel Gálvez y Alejandro Cruz Montero, e incluso un vals titulado Caballero Andante dedicado a Fernando Belaúnde Terry durante su primer período de gobierno pero que no llegó a entregar personalmente; Que, la obra musical de Eduardo Márquez Talledo resalta por haber sido interpretada, a lo largo de la vida de su creador y con posterioridad a su fallecimiento, por un vasto universo de intérpretes de fama nacional e internacional. Entre los últimos destacan Pedro Infante, Luis Aguilar, Trío Los Diamantes, Rosa de Castilla, Enrique Guzmán, Paul Mauriat, Mario Echevarría, entre otros. Su composición más emblemática, el vals Nube Gris, se erige como uno de los principales símbolos del cancionero criollo y nacional junto a temas como El Plebeyo de Felipe Pinglo, La Flor de la Canela de Chabuca Granda y Alma Corazón y Vida de Adrián Flores Albán, los que resultan fundamentales para entender el desarrollo histórico de la música popular en Perú; Que, conjuntamente con las referencias históricas, el Informe N° 000278-2017/DPI/DGPC/VMPCIC/MC de la Dirección de Patrimonio Inmaterial, se detalla las

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